miciudadreal - 11 mayo, 2018 – 09:13
En el Centro Pompidou de Málaga se puede ver desde el 4 de diciembre de 2017 hasta el 2 de marzo de 2020 la interesante exposición Utopías modernas, recorrido por las colecciones del Centre Pompidou. En ella es posible contemplar una selección de obras que reflejan los acontecimientos históricos que han marcado nuestro tiempo y que han alimentado imaginación e ideales de muchos artistas.
¿Qué es Utopía? La RAE proporciona dos acepciones. La primera, “Plan, proyecto, doctrina o sistema deseables que parecen de muy difícil realización”. La segunda, “Representación imaginativa de una sociedad futura de características favorecedoras del bien humano. En la exposición citada se recoge una frase del artista suizo Thomas Hirschhorn que sirve para acercarnos al concepto mediante una serie de palabras: “Utopía significa: Sueño, Acción, Vida, Esperanza, Inocencia, Novedad, Energía, Coraje, Visión, Futuro”.
También de Francia llega un proyecto que poco tiene que ver con la utopía pues está inmerso en la férrea realidad de los negocios, aquellos en los que sólo cuentan los beneficios a cualquier precio. El empresario francés Nicolás De Villiers, en un encuentro con los periodistas en la localidad francesas de Les Epesses, ha declarado hace unos pocos días que el parque temático de Toledo dedicado a la Historia se llamará Puy du Fou España. También ha dicho que no descarta retrasar la inauguración del espectáculo nocturno, prevista para abril de 2019. La razón principal hay que buscarla en las múltiples alegaciones presentadas al proyecto, a las que contestarán de “forma rigurosa y pormenorizada” (La Vanguardia.com, 7-5-2018).
De Villiers ha puesto también la nota emotiva en la rueda de prensa, pura propaganda dirigida a los toledanos “buenos”, aunque también los hay “malos” y se oponen al proyecto, fundamentalmente Ecologistas en Acción y la plataforma ‘Queremos saber la verdad de Puy du Fou’. Desde que él era pequeño, tuvo clara su apuesta por crear un parque temático en Toledo, pues desde niño, ha sentido admiración por su Catedral y por las esculturas de su parte superior.
El Puy de Fou francés comenzó su andadura en 1977 y hoy es una realidad que, según su propia página de Internet, tiene sesenta espectáculos diurnos y nocturnos, cuatro pueblos de época, veinticinco restaurantes y cinco hoteles temáticos. Para su actividad son fundamentales los miles de voluntarios que colaboran en los espectáculos. Tanto, que hace unos meses Nicolas De Villiers declaraba que si la estructura económica por él presidida caía bajo la influencia de una ley aprobada sobre trabajo de los voluntarios “entonces, el Puy du Fou está muerto” (ouest-france.fr, 17.3.2018).
El comienzo de las obras para el Parque proyectado cerca de Toledo, según se puede ver en la página de Internet, está previsto este verano, para poder hacer en Primavera de 2019 un espectáculo nocturno sobre la historia de España. En Primavera de 2021 ya estará listo el Parque y se podrán ver cuatro “grandes espectáculos diurnos”, siempre según las previsiones. El proyecto necesita una inversión de 244 millones de euros hasta 2028, año en el que se deberían haber creado 3.329 puestos de trabajo en la zona, 876 en el mismo Parque. Todo ello, con un gran respeto a la naturaleza, según se indica en la publicidad.
Lo de siempre, pura propaganda para encandilar. Por parte de las administraciones todo tipo de facilidades y ayudas para estos proyectos dentro de la línea, según expresión popular, “cuento de la lechera” o “castillos en el aire”. El colectivo ‘Queremos saber la verdad de Puy du Fou’ comenzaba su comentario hace unos días al artículo de Lope G. Palomeque “Odiseo y el Pou du Fou” de la siguiente forma: “El empresario De Villiers canta desde su Monte del Loco, y le hacen el coro Emiliano García Page y Milagros Tolón, y así tratan de atraer a los toledanos hacia su roca, o hacia las aguas abisales, con promesas de maravillas. Muchos saltarán encantados por la melodía, y se hundirán en las aguas turbias, y puede que sea tarde para nadar hacia la superficie cuando se den cuenta del engaño” (hombredepalo.com, 30.4.2018).
Además, hay un peligro evidente para el paisaje de la zona, como ha escrito el profesor Antonio Zárate en un artículo titulado “Puy du Fou ¿Paisaje o decorado artificial para Toledo?” (La Tribuna de Toledo, 4.5.2018). Concluye de esta forma: “Todo, pues, nos lleva a preferir, sin ninguna duda, el paisaje que tenemos como patrimonio compartido al decorado artificial como oferta especulativa de inciertos beneficios para la colectividad”.
Y es que hay que recordar que ya tenemos una buena nómina de propósitos frustrados, con declaración incluso de proyectos de interés singular (PSI), que iban a crear miles de puestos de trabajo, como la Ciudad de los Bosques en Toledo, o en Ciudad Real el Aeropuerto y el resort turístico Reino de Don Quijote, como se decía hace una década. Este último a inaugurar en 2010, según se afirmaba en la propaganda, con la previsión de construcción de más de 9.000 viviendas, hotel-casino con 800 habitaciones, salón de juego de 6.000 metros cuadrados, auditorio para 3.000 personas, centro de convenciones polivalentes y spa de lujo de 2.700 metros cuadrados (Lanza, 6-4-2008) ¿Les suena la música, pacientes lectores? Pues eso.
Isidro Sánchez
Desde el revés de la inopia
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